Elena Lobacheva, «La Novia de Chucky»

Última actualización: 5 de noviembre de 2015

«Apuñalar al azar el cuerpo de un ser humano y verlo morir, me proporciona una sensación comparable con el placer sexual». Elena Lobacheva

Elena Lobacheva nació en 1989 en Moscú (Rusia). Desde niña fue solitaria y proclive a la violencia. A veces gustaba de maltratar animales, sobre todo gatos, y pasaba largas horas mirando películas de terror.

Desde su infancia estuvo obsesionada con la película La novia de Chucky, protagonizada por Jennifer Tilly, Brad Dourif y Katherine Heigl. Le gustaba tanto que inclusive se hizo un tatuaje en un brazo; su muñeca favorita siempre estaba a su lado. Esa película se convirtió en una especie de instrucción para ella.

Elena compartía el departamento con su madre y su padrastro. Los vecinos la consideraban «amable y agradable».

Sin embargo, su oscura transformación se iba reflejando en su apariencia. Además de los tatuajes, se afeitó la cabeza y comenzó a usar ropa militar. Según un informe, «el cuarto de Lobacheva era desordenado y sucio, había malos olores y objetos personales tirados por todo el suelo». Además, compartía la habitación con un conejo que tenía como mascota.

Paul Voitov nació en 1994 en Moscú (Rusia). A los 19 años, conoció a Elena y se hicieron amantes. Ambos compartían el gusto por la violencia y el horror. Para entonces, las fantasías homicidas de ambos se tornaban cada vez más fuertes.

Según declararía Elena Lobacheva tiempo después, navegando por Internet encontró «una página con instrucciones, paso a paso, para matar a la gente». Ese mismo año, Anatoly Michalev, el alcalde de la ciudad siberiana de Chita, sugirió dispararles a las personas sin hogar con el fin de resolver los problemas asociados con ellos. «Por desgracia, no tenemos una licencia para dispararle a los indigentes, y ahora no hay otra maneras de deshacerse de ellos». Ella y Paul decidieron probar la experiencia.

En julio de 2014, dieron el primer paso. Salieron a la calle vestidos de negro en busca de una víctima. Pronto la encontraron: un indigente que se les acercó a pedirles una moneda. Lo que obtuvo de ellos fue una serie de cuchilladas, propinadas por Elena Lobacheva. El hombre quedó sobre la acera, mortalmente herido, desangrándose y quejándose. Ella siguió acuchillándolo hasta que estuvo segura de que estaba muerto. Luego tomaron fotos con sus teléfonos móviles.

Celebraron el evento emborrachándose juntos. Pero lo que más atrajo la atención de Elena Lobacheva fue lo que experimentó. Sobre eso, diría: «Apuñalar al azar el cuerpo de un ser humano y verlo morir, me proporciona una sensación comparable con el placer sexual».

Desde ese momento, ella y Paul se convirtieron en cazadores de indigentes. Se hacían llamar «La Banda de los Limpiadores». Estaban dispuestos a que Moscú quedara libre de aquellos a quienes consideraban unos parásitos desarrapados.

Durante ocho meses, utilizando una amplia gama de cuchillos, se dedicaron a recorrer las calles, acuchillando a los vagabundos y tomando fotografías y vídeos de los asesinatos.

Once mendigos murieron de esa manera. Buscaban a sus víctimas en lugares aislados y los mataban durante la noche. El perfil de las víctimas hacía que a nadie le importasen esos crímenes; la policía no intentaba buscar al asesino, ya que se trataba de ciudadanos indeseables según la opinión de la sociedad.

A veces miraban en el ordenador las fotografías de todas sus víctimas, con los estómagos abiertos y partes del cuerpo mutiladas, y esto los excitaba sexualmente.

Su último asesinato, sin embargo, no tuvo como víctima a un indigente. Al parecer debido a una confusión, atacaron a Sergei Yevseyev, un trabajador de una sucursal bancaria, quien se había detenido a descansar en el banco de un parque cuando iba de regreso a su casa.

El padre de la víctima declararía: «Mi hijo Sergei no era ni indigente, ni alcohólico. Él trabajaba en un banco y se había reunido con un amigo en un bar local para charlar y tomar una copa. Después de salir de él, caminaba hacia su casa cuando lo atacaron, clavándole el cuchillo más de 107 veces».

El último ataque precipitaría su caída. Prokhor Gorshkov, un barrendero de 45 años, había terminado su trabajo y estaba en camino a su casa cuando fue atacado por la pareja. Fue apuñalado en la espalda en varias ocasiones, pero logró huir y llegó a una comisaría cercana, donde dio una descripción de sus atacantes. La policía revisó los videos de las cámaras de seguridad de la zona; los asesinos fueron filmados mientras atacaban al hombre. Una vez que los identificaron, fueron a la casa de Elena Lobacheva y la detuvieron.

Los medios la bautizaron como la Novia de Chucky. Paul Voitov declararía que Elena Lobacheva y él estaban en una cruzada para librar a la ciudad de vagabundos y alcohólicos.

Olga Lobacheva, la madre de la asesina en serie, declaró que su hija no podía haber cometido los asesinatos: «Ella no pudo ser. Sí, es desordenada y sucia, pero es una buena persona. Siempre me da apoyo. No mataría a nadie. No hay ira en sus ojos».

Lista de víctimas:

SA Evseev – Nacido en 1979.
Matitsyn VN – Nacido en 1982.
Mitrushkin SN – Nacido en 1980.
Sulimov AS – Nacido en 1962.
Danilov GS – Nacido en 1986.
Shitik AY – Nacido en 1978.
Sultanov DB – Nacido en 1972.
Pomogaev DO – Nacido en 1989.
Volozhanin SD – Nacido en 1971.
Sano N. – Nacido en 1994.

Dos de las víctimas de Elena Lobacheva todavía no han podido ser identificadas.